CĆ³mo #psicĆ³logos clĆnicos, son diversas las razones personales y profesionales que van orientando hacĆa un estilo de formaciĆ³n para realizar la labor de la #psicoterapia. Desde la formaciĆ³n en psicoterapia psicoanalĆtica, hay practicas elementales que van posibilitando al #psicoterapeuta para la escucha, comprensiĆ³n y encuentro con el yo de las personas que llegan a consulta. Dichas prĆ”cticas mĆ”s que ser requerimientos, son entendidas como la suma de elementos que desarrollan conocimientos y habilidades que no pueden ser adquiridos de forma teĆ³rica. Que el #psicoterapeuta lleve su propio anĆ”lisis, continĆŗe con el estudio de los diversos autores y sus teorĆas y la supervisiĆ³n de casos clĆnicos, son algunas de estas bases esenciales. Y es con respecto a la supervisiĆ³n que los #psicoterapeutas se van encontrando con un espacio de creaciĆ³n y replanteamiento de lo que es hacer #psicoterapia.

La #supervisiĆ³n de la #psicoterapia psicoanalĆtica es una prĆ”ctica de #aprendizaje basado en el estudio del material clĆnico que el #psicoterapeuta expone acerca de determinadas sesiones, donde en compaƱĆa de otro #psicoterapeuta de mayor experiencia buscan crear un intercambio de ideas, un espacio de apertura y reflexiĆ³n en el que una segunda mirada pueda transmitir nuevas perspectivas para la comprensiĆ³n del funcionamiento mental de los #pacientes. Lo que lleva a cada #psicoterapeuta a tomar la decisiĆ³n de solicitar supervisiĆ³n es diverso, puede verse como una sugerencia institucional o acadĆ©mica para sostener la formaciĆ³n, puede buscarse al ir iniciĆ”ndose en la prĆ”ctica de la #psicoterapia como una manera de encontrar mayor seguridad ante el encuentro con el otro, o puede abordarse desde el interĆ©s de afinar el ojo clĆnico y tratar de alcanzar a ver los puntos ciegos que al estar dentro de la sesiĆ³n no se distinguen. Estas necesidades pueden hablar de los diferentes propĆ³sitos directos e indirectos de la supervisiĆ³n, lo cierto es que en este encuentro el #psicoterapeuta va soltando la necesidad de certeza, de saber las respuestas y soluciones para todo lo que ocurre con el #paciente, y va desarrollando e involucrando la capacidad analĆtica de escuchar y de entender.
AsĆ como se realiza durante las primeras sesiones con los #pacientes, es importante marcar un encuadre acerca de la manera en la que se lleva a cabo el trabajo de supervisiĆ³n. AdemĆ”s de aspectos como los horarios, la frecuencia y duraciĆ³n de los encuentros, el supervisor puede transmitir las maneras en las que considera puede ser provechoso ese espacio. Un complemento valioso a considerar es acerca de lo que pasa dentro de la interacciĆ³n entre supervisor y supervisado, pues el equipo que se forma puede producir diversas reacciones para ambos #psicoterapeutas, por ejemplo, desde la manera en la que el supervisado toma las puntualizaciones que se le hacen, percibiĆ©ndolas como un regaƱo o una limitante, convirtiendo el espacio de supervisiĆ³n en un juicio persecutorio. Algunos de estos seƱalamientos podrĆ”n llegar a enfrentar aspectos personales no observados, pero estos cuestionamientos tienen la Ćŗnica motivaciĆ³n de profundizar en el material clĆnico para regresarlo al trabajo dentro del consultorio. TendrĆ” que ver en cierta medida con la manera en la que intervienen estas sugerencias, de ahĆ la importancia de supervisar con alguien con quien se sienta comodidad, sin embargo es necesario prestar atenciĆ³n a las resistencias, oposiciones o ansiedades que se presenten.

Otro de los alcances de la supervisiĆ³n clĆnica es acerca del reconocimiento de la #contratransferencia. Al irse adentrando en las vivencias de los #pacientes, el #psicoterapeuta se puede ir encontrando con sus propios relatos y en ocasiones esto puede remitir en aspectos no tan elaborados de sĆ mismo. Identificar quĆ© le despierta aquello que se le estĆ” transfiriendo, distinguir de entre las reacciones que provoca el #paciente, cuales son propias de la forma en la que se relaciona con el mundo, y cuales son propias del #psicoterapeuta, son asuntos que pueden ser gestionados en supervisiĆ³n. En determinadas situaciones, el supervisor puede seƱalar cuales de estos temas los podrĆa trabajar el #psicoterapeuta en su propio #anĆ”lisis, dĆ”ndole a cada una de estas elaboraciones su propio espacio.
Es asĆ que, mediante la interacciĆ³n, los encuentros y alianzas, el #psicoterapeuta se va formando en identificaciĆ³n con aspectos de sus supervisores, maestros o compaƱeros, hasta ir desarrollando su propio estilo. La experiencia de la supervisiĆ³n clĆnica lleva a una transformaciĆ³n del #psicoterapeuta tanto en su saber cĆ³mo en su hacer. AsĆ como se escuchan y analizan las historias de los #pacientes, por igual se escucha y analiza a profundidad lo que pasa dentro y fuera de las sesiones. El proceso de supervisar se va volviendo cada vez mĆ”s disfrutable conforme se va teniendo mĆ”s clara su funciĆ³n.