A lo largo de nuestra vida hemos crecido con una idea del #amor muy distinta a lo que en realidad sucede en las relaciones de pareja, afortunadamente y de manera cada vez más frecuente se ha comenzado a tener una cultura distinta en la que se ha popularizado el romper con estos mitos del #amorromántico que los cuentos de Disney o las telenovelas suelen presentar, demostrando con ello que esto no es un reflejo de lo que pasa en un noviazgo o matrimonio.
El #amorromántico nos muestra ideas falsas que conllevan a expectativas irreales de una relación de pareja, de cómo debería ser y comportarse la misma e incluso de cómo debería comportarme yo en ella. Si bien, algunas de estas ideas en su mayoría pueden estar presentes al inicio de las relaciones, se espera que con el tiempo se modifiquen para que los vínculos sean más sanos y maduros.
Podemos decir que al comenzar las relaciones se da el proceso del enamoramiento, en el cual existen cambios biológicos que incluso influyen en algunas de estas manifestaciones de las que queremos hablar y la primera, es la relacionada a la idealización de la pareja que va generando que la percibamos de manera poco realista, sobrevalorando sus cualidades y minimizando defectos. Sin embargo, respecto a ello podemos decir que este enamoramiento desactiva la vía neuronal responsable de ciertas emociones como el juicio social, por este motivo, la parte del cerebro que nos ayuda a realizar evaluaciones críticas de otras personas, incluidas nuestra pareja, se cierra y de ahí que la forma en que la detectamos no sea objetiva. Con el tiempo, se espera que se pueda lograr una valoración de la pareja realista, que incluya tanto sus virtudes, como también que se le vea con la posibilidad de errar como cualquier ser humano lo hace.
Otra manifestación del #amorromántico es considerar que estos pequeños defectos que por ahora se detectan, como pueden ser relacionados al carácter, al temperamento o incluso la presencia de hábitos nocivos, con el paso del tiempo se verán atenuados o que a través del amor se puede ayudar a cambiarlos y lamentablemente es una visión que tiende a ser equivocada, pues aunque es posible que una persona pueda modificar cualquiera de estos aspectos, ello conlleva un arduo trabajo, en el que dé inicio tiene que estar presente el deseo individual de quererlo hacer, también, fuerza de voluntad, persistencia e incluso, en muchas ocasiones, el apoyo de un proceso de psicoterapia.
Cuando existe prevalencia de la etapa de #enamoramiento la desactivación neuronal también ocurre en emociones como el miedo y, por tanto, es que en estos momentos puedan tomarse decisiones más rápidas e incluso llegar a ser impulsivas. Por el contrario, en épocas posteriores en las que una pareja ha madurado, ambos pueden reflexionar sobre los aspectos favorables y en contra de una situación en particular para poder tomar una mejor decisión y con la que se sientan tranquilos.
Llegar a un estado de madurez en una relación de pareja no es un proceso sencillo pues implica un trabajo de conocimiento, análisis y gestión emocional individual pues de lo contrario, es difícil que se logre este trabajo en conjunto. Cuando uno de los integrantes de la relación no se encuentra dispuesto a trabajar sobre sí mismo se puede caer en ideas poco sanas de las relaciones, como es la de “la media naranja” que tiene que ver con la necesidad de encontrar a una persona que viene a complementar tu vida para hacerte sentir feliz, sin embargo, en ello se perpetúa la percepción de estar incompletos y, por ende, con menor felicidad mientras no se tenga una pareja.
También, hemos escuchado la frase de “el amor todo lo puede”, la cual puede ser una predisposición que genere forzar permanecer con quien se ha elegido como pareja para superar todo tipo de conflictos, lo cual puede ser sumamente peligroso pues está negando la posibilidad de salir de un vínculo que pueda ser perjudicial.
Finalmente, existen múltiples factores que en conjunto determinan que una relación sea próspera o no, sin embargo, los procesos de psicoterapia te ayudan a conocerte mejor, conocer a tu pareja y también, a encontrar mejores maneras de convivencia que fortalezcan vínculos sanos.
Lic. Carolina Villarreal
Psicóloga clínica
Asociación Libre Monterrey