¿Alguna vez te ha pasado, con alguno de tus #hijos, que te pones a pensar porqué se comporta de determinada manera que no te gusta y que por más que le dices lo que tiene que hacer, no logras nada con él o con ella?.
Mil veces te has preguntado, ¿porquè mi hijo no escucha? ¿comó mejorar la obediencia?. Pero tal vez no te has puesto a pensar que realmente no le preguntas cómo se siente o porqué se comporta así, quizás si te acercas un poco y le empiezas a pedir su opinión podría mejorar un poco su relación.
Como dicen últimamente los #memes en las redes sociales, “el #hijo que te cuesta más” y se refiere que te cuesta más educarlo y formarlo. Este tipo de niños o adolescentes, es el que se convierte en el que "no ves", porque nunca te pide nada. Generalmente es el que se la pasa encerrado en su cuarto pero de pronto te empieza a dar problemas tales como que te llaman del colegio porque agredió a un compañero o de pronto empiezas a ver destrozos en la casa o te empieza a contestar mal, no sigue instrucciones, no respeta las reglas de la casa, entonces de ser el #hijo que no ves, se convierte en el hijo que más te preocupa.
Es el #hijo que está tratando de llamar la atención, tu atención, principalmente como #madre o #padre, quiere que lo veas que te preocupes por cómo se ha sentido, que le preguntes si le gusta el deporte al que lo llevas, etc.
Los niños y las niñas necesitan sentirse queridos a cualquier edad. Si nosotros como adultos necesitamos cariño de familia, amigos, de una pareja. Con mayor razón nuestros hijos. Esto es vital para su experiencia y su #autoestima. Cuando nuestros hijos no dudan que los vemos, pero sin usar comparaciones, ni críticas, ni etiquetas, crecen como adultos que se contemplan a sí mismos de manera positiva y son capaces de ver a los demás.
Por lo general como seres humanos nos fijamos siempre en lo que falta en alguna situación, entonces a partir de ahora hay que remarcar las situaciones y detalles positivos de nuestros #hijos. Por ejemplo:” hijo ahora en la mañana sonó tu alarma y te levantaste más rápido que otros días, te felicito, eres más responsable” o cuando alguno de tus #hijos hace algún comentario en el que puedes participar, exprésale tu opinión, eso hace que ellos sientan que sus cosas y lo que les pasa es importante para nosotros.
Cuando le pides que limpie su cuarto y ves que solamente ha tendido su cama, dile “hijo muy bien, ya tendiste la cama y te quedó muy bien, te felicito, creo que no tardarás mucho en dejar limpio tu espacio. Otra opción es hacerlo junto con él. Recuerda que los niños aprenden también con el ejemplo.
Hay otra parte en la que también caemos comunmente que es la comparación con nuestros #hijos. El #hijo del vecino es muy guapo o es muy amable y educado, así lo afirmamos a nuestros #hijos sin saber que a lo mejor ese niño tiene problemas de aprendizaje o vive muy solitario, no podemos saber, ni podemos comparar, ni siquiera con los mismos hermanos.
Centrarnos en resaltar las virtudes de nuestros #hijos. Y a lo mejor también lo que no hacen muy bien, para motivarlos a que se esfuercen más cada vez y logren hacerlo mejor.
Para los niños no hay nada peor que no aprobar el examen de sus padres, ver como su padre o madre admira al hijo del vecino o de sus amigos. Expectativas irracionales pueden tener un efecto devastador en el #autoestima de nuestros hijos, Así que míralos bien, aun cuando no es fácil.
Quieres saber más acerca de este tema, acércate a un psicólogo, toma terapia o toma sesiones para padres, porque nadie sabemos cómo ser padres y madres, sólo conocemos la forma en que nos educaron a nosotros.
Acércate a los especialistas, no te vas a arrepentir de tener una mejor relación con tus hijos, hijas y aún con tu pareja.
Lic. Rocío Argüelles.