Hoy en día la #inteligencia emocional en redes sociales se encuentra presente debido al interés de mantener una #higiene mental que ayude a adaptarnos a los cambios que la pandemia por COVID-19 nos ha hecho experimentar; y para hablar de #inteligencia emocional primero tenemos que definir qué es la inteligencia; la Real Academia Española la define como:
· Capacidad de entender o comprender
· Capacidad de resolver problemas
· Conocimiento
· Habilidad, destreza y experiencia
Se tiende a considerar que la inteligencia se limita a hacer números en una boleta de calificaciones, premios académicos ganados o algo relacionado a lo educativo o institucional, estas definiciones de la Real Academia nos acercan más a considerar que es una herramienta de vida que se puede presenciar en diferentes campos, tal como lo propone Howard Gardner con su teoría de las #inteligencias múltiples; en la cuál enumera 8 tipos de inteligencia que son:
· Inteligencia lingüística: habilidad para usar las palabras de manera efectiva al hablar o escribir.
· Inteligencia lógico-matemática: habilidad para manipular y aplicar los números, así como el uso de razonamiento lógico para resolución de problemas.
· Inteligencia musical: facilidad para relacionarse, manipular y crear con los sonidos, ritmos y patrones que percibe el oído.
· Inteligencia espacial: capacidad para visualizar, representar y formar ideas o imágenes mentales desde diferentes ángulos.
· Inteligencia corporal-cinestésica: destreza en el uso corporal para expresar por medio del equilibrio, coordinación, flexibilidad, velocidad y fuerza.
· Inteligencia interpersonal: capacidad de empatizar y conocer a los demás.
· Inteligencia intrapersonal: conocimiento de uno mismo.
· Inteligencia naturalista: Habilidad sensitiva para el reconocimiento de otras especies y sus dinámicas como la flora, fauna y clima.
En esta ocasión hablamos de la habilidad que se relaciona con la inteligencia interpersonal e intrapersonal llamada inteligencia emocional; podemos definirla como la destreza de conocer las emociones y sentimientos personales y de los demás, de manera que podemos acceder a ellos, comunicarlos, regularlos y generarlos para un crecimiento personal y el desarrollo de competencias emocionales como autoconocimiento emocional o conciencia de uno mismo, Autocontrol emocional o autorregulación, Automotivación, Empatía o reconocimiento de emociones ajenas y habilidades sociales (Daniel Goleman).
La inteligencia emocional como todas las destrezas requiere de constancia, motivación y aprendizaje, a continuación se describen algunas claves para potenciar y desarrollar esta destreza:
1. Evita el juicio severo hacía ti y los demás, tiende a buscar y practicar la retroalimentación.
2. Busca objetivos alcanzables a corto plazo y reconoce genuinamente cuando estos sean logrados.
3. Procura no rechazar tus sentimientos y emociones, busca recibirlos desde el reconocimiento y la validación personal.
4. Recibe los cambios como una oportunidad de crecer y desarrollar tu adaptabilidad.
5. Determina cuales son tus potencialidades y límites.
6. Procura la comunicación asertiva en tus vínculos y relaciones.
7. Reflexiona acerca de tus sentimientos y emociones.
8. Aumenta tu vocabulario emocional con el objetivo de reconocer fácilmente tu estado de ánimo.
9. Asume la responsabilidad de tus actos.
Podemos concluir que relacionarse y vivir desde la #inteligencia emocional determina una gran influencia en nuestra toma de decisiones, conflictos y logros en la cotidianeidad, potencializando la adaptabilidad, flexibilidad y dominio personal que nos permite rodearnos de ambientes seguros que posibilitan un crecimiento exponencial de uno mismo.
Lic. Krystal Alonso
Psicóloga clínica